Que sea la última vez
que me dejan mal herido,
con el insomnio de un mes
y dos copas de vino servido.
Hay gente que tiene que drogarse
para sentir lo mismo que contigo he sentido.
Toco al piano una Marcha Turca
para ver si así me animo,
pero termino improvisando
un Claro de Luna bastante deprimido.
Esta noche en particular
tengo miedo a quedar dormido.
La casa entera está embrujada
con los desperdigados objetos de tu olvido.
Soy una caricatura oscura
volando en el periódico matutino
a merced del mismo viento
que te apartó de mi camino.
Eres todo lo que nunca se contó
después del final de un cuento de hadas
que sería prohibido.
Érase una vez un avión
que en medio del atlántico
se había hundido,
todo iba tan bien y en una fracción
todo estaba perdido…
No te niego, no te olvido,
no te llamo, ni busco, ni escribo.
Todo terminó, como habías querido.
Fue un placer haberte conocido
te deseo lo mejor, de todo corazón,
aunque nunca hubiera sucedido.